Originalmente publicado en Curistoria , el jueves, 27 de marzo de 2014 En 1991, el acorazado USS Missouri dispara contra objetivos iraquíes estacionados a lo largo de la costa de Kuwait. Wikimedia Commons No parece muy lógico que en una batalla el resultado sea tan favorable a un bando en el número de bajas que parezca casi mentira. Más que nada porque sabiendo lo que uno puede perder en una batalla, la vida, parece más adecuada una rendición que exponerse a una derrotada humillante y desastrosa. En cualquier caso, la historia está salpicada de este tipo de encontronazos en los que uno de los bandos puso todos los muertos que quedaron en el campo de batalla tras su derrota. Por supuesto, ya saben ustedes que algunos de los números que veremos a continuación son discutibles, lo que no cambia el sentido de la derrota. Y de ellos sacamos dos lecciones importantes: si eres persa, es octubre y te enfrentas con el ejército macedonio, da...