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Mostrando las entradas etiquetadas como Carlos V

RH_Podcast_011. Auge y Ocaso de un emperador: Carlos V

Carlos accedió al trono de España como Carlos I en virtud del testamento de su abuelo Fernado II de Aragón, en el que le nombraba Gobernador y Administrador de los Reinos de Castilla y León. La muerte de Maximiliano I en enero de 1519 propició que fuese proclamado en junio de ese mismo año como Rey de romanos, lo que le convertía en el soberano del Sacro Imperio Romano Germánico, que gobernaría como Carlos V de Alemania. De esta manera, Carlos reunió en su persona todos los territorios procedentes de sus abuelos: Habsburgo, Borgoña, Aragón y Castilla. Fue coronado Rey de romanos en 1520, y coronado Emperador del Sacro Imperio Romano Germánico por el papa Clemente VII en febrero de 1530, otorgándole de esta manera la supremacía de la autoridad imperial sobre todos los reyes de la cristiandad y la defensa a ultranza del catolicismo. Sin embargo, en 1543 establece las Instrucciones de Palamós, que sentaban las bases de la transición a la figura de su hijo. A partir de ese mome...

De como Juan Vela de Bolea acabó con la horrible y monstruosa sierpe......

Juan Vela de Bolea (el capitán Bolea) fue una de los principales personajes de la historia de la villa de Uceda , a el se le atribuye un hecho dentro de la leyenda y tradición popular, fechado alrededor de 1590: "Infestaba a esta tierra una horrible y monstruosa sierpe, no solo asustando con sus ruidosos silvos, sino también devorando, y siendo despojos de su voracidad quantos racionales e irracionales se la presentaban: a estos estragos pudo poner fin nuestro devotísimo e ínclito Capitán; pues prevenido de oraciones y súplicas fervorosas a su amantísima Imagen de la Varga, no obstante hallarse en edad muy avanzada, armado del inexpugnable escudo de su retrato, desafiando en campo raso a la serpiente horrible, invocando el dulce nombre de la Virgen, quedó la fiera por despojo del fuerte brazo de Bolea, y puesto término a tantos estragos: desentrañaron la monstruosa sierpe, que era del tamaño de un becerro anual, y colocaron en la Iglesia la cabeza, espinazo y alas, que tanto ...